A fin de año las correderas del río Pilcomayo estarán listas para asegurar ingreso de las aguas

31-10-2009
A fin de año las correderas del río Pilcomayo estarán listas para asegurar ingreso de las aguas

 

 
A fin de año las correderas del río Pilcomayo estarán listas para asegurar ingreso de las aguas    

Un gran despliegue de maquinarias y obreros se observa en distintos frentes de trabajo en una amplia franja del departamento Ramón Lista, dado que se pretende que a fin de año esté terminado el sistema de correderas que permita el ingreso de las aguas del río Pilcomayo a territorio formoseño.

 
Asimismo y en este caso apuntando a proteger a las poblaciones se refuerzan y extienden los anillos de defensa, dado que ante los grandes picos de crecida los desbordes amenazan con ingresar a las comunidades de la zona.
La tarea no es sencilla dada las altas temperaturas reinantes y lo arduo de la labor a ejecutar, ya que se deben hacer nuevas correderas y también limpiar amplias franjas de terrenos. Para tener una idea, el agua del Pilcomayo transporta una carga de sedimentos estimada en 90 millones de toneladas anuales en promedio, que se depositan en su cauce y en ambas márgenes, que por supuesto debe ser limpiado.
El ingeniero Cristian Peter, de la DPV, organismo que tiene a su cargo la supervisión de los trabajos que fueron proyectados junto a la Unidad Provincial Coordinadora del Agua, y que están siendo desarrollados por varias contratistas, explicó que "en estos momentos se ejecuta una nueva traza de correderas fluvial, y dado que se trabaja en terreno anegado se utiliza una máquina excavadora tipo anfibia, la cual opera en una extensión de siete kilómetros para así conectar el sistema de correderas que ya se realizaron el año pasado", memorando que existe corredera en funcionamiento a la altura de la localidad de El Potrillo.
Subraya que "disponer de todo este sistema de correderas es a efecto de generar toda una línea de corriente entre la que funciona a la fecha y otra ejecutada en 2008, de tal manera de ir reemplazando a las que se han colmatado de sedimentos que arrastran las aguas".
"Pensamos que a fines de diciembre los trabajos estarán concluidos, con lo cual estaríamos preparados para la época donde comienzan a verificarse los ingresos de volúmenes importantes de agua", anticipó optimista.
Abundó diciendo que "si bien las correderas permiten el ingreso de las aguas a la provincia, dado justamente los picos de crecida que se dan anualmente, estos producen anegamientos ya que la sección por donde ingresan los grandes volúmenes no es suficiente, por lo que de manera complementaria se ejecutan obras de defensa alrededor de zonas pobladas como El Potrillo y El Quebracho, a fin de preservar las poblaciones. Se proyectó la ejecución de 33 kilómetros de un nuevo terraplén de defensa con compactación y el reacondicionamiento de otro anillo de diez kilómetros que protege a El Potrillo".
Aludió a que "además de de estas comunidades mencionadas antes y las que están cerca de Palmar Largo y donde se cuentan los pozos petrolíferos, hay varias otras comunidades e inclusive toda la red de caminos vecinales del departamento Ramón Lista y también una porción del Bermejo, que se protegen con este anillo defensivo".
Recursos estimados en más de 25 millones de pesos son los que se estarán desembolsando para costear todo lo proyectado, que implica un despliegue de máquinas y recursos humanos de magnitud durante varios meses.
Justamente las obras previstas tienen el propósito de mejorar la capacidad de conducción del sistema de correderas fluviales en la zona donde mayor sedimentación se ha producido en el anterior periodo de crecida, para lo cual se plantea trabajar con las obras hidráulicas necesarias, incluso para que permitan atemperar desbordes hacia localidades vecinas.
Entre las características salientes de las obras de limpieza y excavación de canales a ser realizadas en lo que hace a las correderas, las mismas abarcarán zonas como la Cañada Pérez, Tres Pases, Lecherón, Lomada, El Reventado-El Silencio, además de ensanchar el subtramo ejecutado el año pasado y los cierres de los cauces transversales secos actualmente en Cañada de El Surubí.
Existen proyectos para trabajos específicos en varios sub-tramos donde el año pasado se ejecutaron tareas de emergencia, con el objetivo final de disponer de una línea de escurrimiento principal entre la corredera existente denominada El Reventado hasta la altura del Puerto Moreno, con lo cual se tendría consolidado un sistema de más de 32 kilómetros de longitud total.
Un dato no menor es que se incluye la conservación con la utilización de maquinas especificas como son las anfiexcavadoras.

 

Defensas

Por otra parte, también se plantean defensas contra inundaciones en las franjas que van desde El Silencio-La Brea y El Quebracho-Pescado Negro, consistente en un terraplén de contención de los desbordes provenientes del sistema de correderas en la zona de divagación, aguas debajo de la localidad de El Potrillo.
Además de evitar el ingreso de las aguas a zonas pobladas, esta barrera será utilizada al mismo tiempo como camino de vinculación de las comunidades defendidas con otras trazas de la red vial terciaria.
Las comunidades a proteger son además de las antes cuatro señaladas, otras como Vaca Perdida y La Rinconada, además de la red de caminos vecinales de la zona, la cual se encuentra en la región de riesgo de inundarse.
Este anillo a ejecutarse constituirá la continuidad hacia el sur de la defensa de El Potrillo-Palmar Largo ejecutada en el 2005, comprendiendo casi 15 kilómetros. Tendrá un ancho de coronamiento de seis metros, taludes de 1:3 y una altura que en sectores alcanzaría casi los tres metros, tendiéndose una revancha de casi 1.2 a 1.4 metros en los sectores más críticos, tomando las máximas crecidas que se han dado hasta ahora.
Los trabajos incluyen recrecimiento de defensas como la de El Potrillo-Palmar Largo en los sectores más críticos.
 
   

Diarios de Argentina

    
 

 

Leer más